Otro más, otro regalo más que la Virgen deja en la retina de los palmerinos en este año extraordinario de su Coronación Canónica. Las imágenes hablan por si solas, Nuestra Señora del Valle aparece entronizada en el Altar Mayor de la Parroquia para presidir los Solemnes Cultos que en su honor celebra su Hermandad.
Aproximadamente desde 1976 no se observa una estampa similar. En esos años se llevó a cabo una restauración en el ábside Parroquial, en la cual se retiró el hermoso templete que se elevaba en su centro. Tras esta remodelación no se recuerda que ninguna Imagen Titular haya presidido sus cultos desde este lugar, hasta el día de hoy.
Sin duda sorprendente el exquisito altar de la Novena de este año, que hace justicia con una devoción, que desde siempre ha presidido el altar de los corazones de los palmerinos, y que bien merecía ocupar también el lugar preferente de la Parroquia.
La Virgen ya está asunta en el celestial altar de La Palma, esperando la hora de un nuevo Milagro.
Aproximadamente desde 1976 no se observa una estampa similar. En esos años se llevó a cabo una restauración en el ábside Parroquial, en la cual se retiró el hermoso templete que se elevaba en su centro. Tras esta remodelación no se recuerda que ninguna Imagen Titular haya presidido sus cultos desde este lugar, hasta el día de hoy.
Sin duda sorprendente el exquisito altar de la Novena de este año, que hace justicia con una devoción, que desde siempre ha presidido el altar de los corazones de los palmerinos, y que bien merecía ocupar también el lugar preferente de la Parroquia.
La Virgen ya está asunta en el celestial altar de La Palma, esperando la hora de un nuevo Milagro.
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