Padre Jesús del Pasado. Estampa con sabor añejo es la que la Hermandad de Ntro. Padre Jesús Nazareno nos ha regalado con el clasicista altar de cultos que han preparado para celebrar el Solemne Quinario en honor de sus Sgdos. Titulares.
Del 16 al 20 de febrero la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista acogía en el lado de la Epístola del crucero un elegante y clásico altar de cultos. Resulta novedoso la nueva ubicación de este altar de cultos, ya que en los años anteriores era situado en el sitio contrario al que se encuentra.
Ntro. Padre Jesús Nazareno centraba el conjunto bajo el dosel de cultos de la Hermandad, luciendo el Señor una de sus túnicas bordadas, concretamente la más antigua, la túnica llamada de los cardos. Sobre su cabeza portaba la corona de espinas y las potencias, mientras que sus manos se abrazaban con fuerza a la cruz del martirio. Flanqueando a Ntro. Padre Jesús Nazareno, se encontraban la Stma. Virgen del Socorro y San Juan Evangelista.
María Stma. del Socorro estrenaba para estos cultos manto de terciopelo azul con bordados en aplicación por su cara vista, saya de tisú también bordada en aplicación y antiguo tocado calado con bordados. Lucía sobre sus sienes la corona de salida, mostrandose la Stma. Virgen del Socorro muy bella, manteniendo en su forma de vestir el fino gusto romántico del XIX. San Juan Evangelista llevaba su habitual vestimenta de túnica verde y mantolín rojo, colores característicos de la iconografía de este Santo.
El altar se completaba con una abundante candelería que con su luz iluminaban este dramático conjunto pasionista. El exorno floral se centraba en cuatro finas jarras de claveles rojos en forma cónica, con el que se completaba el altar.
Os dejamos unas fotografías.
Del 16 al 20 de febrero la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista acogía en el lado de la Epístola del crucero un elegante y clásico altar de cultos. Resulta novedoso la nueva ubicación de este altar de cultos, ya que en los años anteriores era situado en el sitio contrario al que se encuentra.
Ntro. Padre Jesús Nazareno centraba el conjunto bajo el dosel de cultos de la Hermandad, luciendo el Señor una de sus túnicas bordadas, concretamente la más antigua, la túnica llamada de los cardos. Sobre su cabeza portaba la corona de espinas y las potencias, mientras que sus manos se abrazaban con fuerza a la cruz del martirio. Flanqueando a Ntro. Padre Jesús Nazareno, se encontraban la Stma. Virgen del Socorro y San Juan Evangelista.
María Stma. del Socorro estrenaba para estos cultos manto de terciopelo azul con bordados en aplicación por su cara vista, saya de tisú también bordada en aplicación y antiguo tocado calado con bordados. Lucía sobre sus sienes la corona de salida, mostrandose la Stma. Virgen del Socorro muy bella, manteniendo en su forma de vestir el fino gusto romántico del XIX. San Juan Evangelista llevaba su habitual vestimenta de túnica verde y mantolín rojo, colores característicos de la iconografía de este Santo.
El altar se completaba con una abundante candelería que con su luz iluminaban este dramático conjunto pasionista. El exorno floral se centraba en cuatro finas jarras de claveles rojos en forma cónica, con el que se completaba el altar.
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Fotos: Manuel V.
